La
crisis actual de la infraestructura: un nuevo horizonte para la
superestructura
Por
Bartolomé Antonio Cazorla Arévalo
Marvin
Harris, en su planteamiento del materialismo histórico, señala como
principal causa de la selección sociocultural la infraestructura.
Ésta incluye los modos de producción y reproducción determinados
por factores demográficos, económicos, ambientales y tecnológicos.
Además, afecta de forma directa a la estructura -que comprende la
organización doméstica y la política- y a la superestructura -que
es el conjunto de ideas, símbolos y valores de una sociedad- dejando
la puerta abierta a la retroalimentación entre estos tres niveles.
Partiendo
de esta distinción, pretendo mostrar cómo la crisis actual, con un
origen en los modos de producción, ha afectado a la organización
doméstica y política de la sociedad, y cómo este hundimiento de la
infraestructura que arrolla a la estructura deja las puertas abiertas
al surgimiento de una nueva superestructura. Sólo hace falta ver los
periódicos, las noticias o simplemente hablar con algún amigo
preocupado sobre la situación para darse cuenta de que lo que hace
falta son ideas nuevas. En otras palabras, un cambio en la
superestructura.
Así,
defiendo que en los momentos de crisis a lo largo de la historia ha
hecho falta la invención de una superestructura que determina la
infraestructura, habiendo un avance -sin entrar a juzgar si este
desarrollo es bueno o malo- en los modos de producción y
reproducción y a su vez en la estructura.
Analizando
la crisis actual, se ve que hay una crisis demográfica con un exceso
de superpoblación en ciertas zonas del planeta y con un
envejecimiento de la población en ciertas otras. Existe una crisis
económica basada en un sistema burocrático complejo y una
institucionalización del dinero mayoritariamente ficticio y una
crisis ambiental que llega -si no ha llegado ya- a destruir
irreparablemente las condiciones de vida necesarias para el ser
humano. Además, tenemos una fe ciega en que las nuevas tecnologías
nos van a salvar de los problemas anteriores. Todo esto es el
resultado del capitalismo liberal, que fue fundado a raíz de nuevas
ideas.
Llegados
a este punto, es necesario un cambio de mentalidad para solucionar
esa cantidad de problemas. ¿Cómo? No lo sé, pero de lo que sí
estoy seguro es de que si en tiempos de crisis no nacen nuevas ideas,
se colapsaría el sistema actual y ello acarrearía mayores problemas
hasta alcanzar un punto crítico sin retorno. Esto conllevaría el
fin de la sociedad actual y nos conduciría a la barbarie.
Con
este pequeño análisis de la situación actual, quiero mostrar que
aunque en un primer momento la infraestructura haya determinado la
superestructura, para el avance de la primera hace falta una
reinterpretación de la segunda. Por ello, ante la crisis actual, lo
único que me cabe hacer es animar a que la gente piense en nuevas
ideas y valores para superar la crisis. Así lo único que nos queda
es buscar un nuevo horizonte a las preguntas que nos plantea la
situación actual.
Muy buen artículo. Felicitaciones de verdad, muchas veces quiero expresarme tan bien como tú pero me pierdo, no soy capaz de encontrar las palabras para explicar algo. Pero tú... Haces que parezca incluso fácil! Asombroso, de verdad!
ResponderEliminarAdemás muy buena información. Gracias.